11 de enero de 2012

Bibioj, pueblo abandonado.


Nos vamos de fin de semana a Castellón, a las faldas del Penyagolosa. Nos alojamos en el Mas de Borràs, una antigua masía con varios siglos de existencia y que fue rehabilitada como hotel rural y de aventura.

Su emplazamiento es de película, rodeado sólo por pinadas. Desde él no se ve ningún rastro de vida humana, excepto una lejana granja a muchos kilómetros de allí.

Entre las actividades del mas está la visita al caserío abandonado de Bibioj. Tras recorrer durante 10 minutos una casi imposible pista de montaña, por supuesto sin asfaltar, repleta de baches, piedras y agujeros, tras una curva aparece, a lo lejos, Bibioj. Dejamos el coche a unos 500 metros, junto a dos casas con un corral en el que hay unas 20 ovejas. Cuando bajamos del coche nos sentimos observados: los animales nos miran sin mover ni un pelo.
Hace una mañana genial, la temperatura es agradable y el cielo está turquesa. Estamos a más de 1.000 metros de altitud y nos rodean miles de pinos, que forran como una moqueta las montañas.
Poco a poco nos acercamos al caserío. Me refiero a Bibioj como caserío y no como pueblo porque no tiene iglesia. Por lo que he podido saber es una de las poquísimas poblaciones de
España que no tienen edificio religioso. Llegamos a Bibioj. La primera casa del pueblo es la antigua escuela, construida en tiempos de la República. Está pintada de blanco y tiene algunos dibujos en sus paredes exteriores. Muchos elementos nos indican la presencia de vida humana, y es que una familia habita entre sus paredes.
Cuando veníamos por el camino, todavía en el coche, nos habíamos cruzado con una furgoneta blanca. El camino era estrecho así que ambos vehículos habíamos tenido que reducir la velocidad. Al estar a la misma altura, el conductor del otro coche había bajado la ventanilla, como con intención de decir algo. Pero nosotros continuamos adelante.
Se trata de la familia que vive en Bibioj, en su escuela. Son una pareja con sus dos hijas, de unos 5 o 6 años. Él lleva barba larga y castaña.


Frente a la escuela hay un coche con matrícula danesa aparcado, así como una moto, con igual matrícula. Aunque me han dicho que no son daneses sino alemanes. Cerca del coche, sobre la hierba, descansan una lavadora antigua, una bañera tipo hidromasaje, una pila de las de lavar la ropa y algún cubo. Parece que es donde lavan la ropa.
Ladera abajo, un columpio que cuelga de la rama de un árbol y hecho con cuerdas y una rueda vieja se mece al ritmo del viento.
A pocos metros de la escuela está la primera casa. Esta se mantiene en pie e incluso se ven restos de la pintura que cubrió sus paredes: azul. Me asomo dentro y hago fotos, pero no me atrevo a entrar porque me parece que hay riesgo de que me caiga en la cabeza lo que queda de casa.
La estampa es de verdad inquietante. Las casas están, en su mayoría derruidas o con sólo parte de sus paredes en pie. La vegetación se ha adueñado de Bibioj y crece con libertad donde antes había una chimenea, un comedor o un lavadero. Me pregunto si los alemanes dejarán a las niñas que campen a sus anchas por las ruinas. Pienso que lo normal es que no, por el peligro que conlleva, pero es que tampoco es normal que vivan allí y que esas crías no vayan a la escuela.
Hago un montón de fotos en las que no se ve ningún fenómeno paranormal, pese a la idoneidad del lugar para ello. Damos una vuelta circular a Bibioj, caserío que fue saqueado en la Guerra Civil tanto por los fascistas como por los rojos. Parece ser que la zona donde se sitúa Bibioj fue un buen escondite para los republicanos huidos.
Por desgracia, la familia de ermitaños no aparece mientras nosotros estamos allí y me quedo con las ganas de preguntarles: "¿Por qué vivís aquí?".

9 comentarios:

  1. Yo iba de peque al Mas de Borràs, q ilu!!
    Besos alicantina ;)

    Andrea o Xuli

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  2. ¡¡Hola Andrea!! :)

    El Mas de Borràs es genial, las instalaciones, el entorno, las actividades... Muy muy chulo. Lo único es que les falta una limpieza al 100% de las habitaciones, habían bichos en las ventanas y a mí eso me mata :'(

    Una besadeta, Andrea!!! ;)

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  3. El nombre correcto de la masía es "BORRAZ" y no "BORRÀS". Esta zona del Maestrazgo. no es de habla valenciana. Más bien se les conoce como: churros ó churrets, dado que al castellano se les une alguna palabra derivada del valenciano. Comentario aparte, merece lo escrito indicando que fué saqueado en la guerra civil. Realmente en Villahermosa hubo durante unos días un frente de guerra entre las dos partes de la contienda, pero no recuerdo a nadie que comente lo del saqueo (creo que es una información errónea). Las casas se han deteriorado por 2 motivos fundamentales: 1) El abandono y 2) el saqueo de las tejas de las viviendas para usarlas en otras edificaciones.

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  4. Hola Anónimo :)

    La masía en la que nosotros nos quedamos se llama Mas de Borràs, no con "z" como tú indicas. Lo puedes comprobar en la misma web http://www.elmasdeborras.com/ ;) Desconozco si anteriormente se llamaba de otra forma, pero ese es el nombre actual :)

    Respecto al idioma, allí sí hablan valenciano. Nosotros mismos hablamos valenciano con la mayoría de personal del alojamiento (¡¡qué majos que son!!). Verás que la misma web está en castellano, valenciano e inglés ;)

    ¡Lo del saqueo nos lo explicaron así! Desde luego ya les vale si no se corresponde con la realidad.

    ¡Gracias por el resto de información y por comentar en el blog! :D

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  5. Hola Anna, soy Víctor M. Catalán. Resido en Barcelona, pero soy nacido en Villahermosa del Río.
    La masía siempre se la ha denominado por los habitantes de Villahermosa "Mas de Borraz" incluso se puede preguntar a los últimos masoveros-residentes de la misma, antes de convertirse en albergue rural. El idioma de esta zona es un castellano-aragonés con influencia en algunas palabras del valenciano. Los gestores actuales del albergue, son de Castellón y por lo tanto valenciano-hablantes; los trabajadores también son en su mayoría de ese origen; de ahí que te atiendan en valenciano; pero si te desplazas al mismo pueblo te resultará casi anecdótico que encuentres en alguno de los comercios que alguien te hable el valenciano. Se supone que el hecho de la pervivencia de la forma de hablar en castellano con fuerte influencia aragonesa, tiene su origen en la reconquista por el rey Jaime de estas tierras. Ignoro si conoces bien la provincia de Castellón; pero se da la curiosidad que las poblaciones regadas por los ríos Mijares ó Millars y el Palancia con sus correspondientes afluentes; son casi todos de habla castellana. Se cree que el rey Jaime dono estas tierras de regadío a los aragoneses que le acompañaban en el avance. Por otra parte me imagino que la oferta comercial del albergue está dirigida fundamentalmente a los habitantes de la Comunidad Valenciana, de ahí, creo ha sido el interés de indicar "Borràs".
    Como comentario adicional indicar que de los numerosos caseríos existentes en el término de Villahermosa, el más poblado era Bibioj, donde llegaron a residir unas 130 personas. Incluso hubo escuela hasta finales de los años 60. La eliminación de esta escuela y otras cinco situadas estratégicamente en otras masías del término municipal, para concentrarlas en el núcleo central, unido a la oferta de trabajo en la zona azulejera de L´Alcora y Onda, y la propia evolución de la agricultura, fue motivo del abandono de estos caseríos.

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  6. ¡¡Hola Víctor!! :D

    Wow, muchas gracias por tomarte las molestias en escribir toda esta detallada información, ¡así da gusto!

    Ahora sabemos mucho más sobre la masía y el entorno :)

    ¡Un abrazo!

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  7. hola. muy interesante el artículo y vuestras aportaciones. Me presento. Me llamo Toni y durante la construcción y los dos primeros años de vida del Más de Borràs, estuve como gerente del albergue. Es verdad que se llamaba Borraz y que se valencianizó por su actuales dueños. Bibioj era una de las excursiones que pusimos al principio pues se podía acceder a pie o en coche desde el Mas. Os contaré que tuve la ocasión de conocer a la última maestra que dio clases en Bibioj y que al principio de visitarlo (1995) se encontraba en bastante mejor estado de lo que contáis ahora. Hace muchos años que no visito la zona, pero es un lugar con mucho encanto. Otra anecdota que nos contó el cuidador del albergue, un señor mayor al que llamábamos Señor Antonio, es que en Bibioj participaron durante la guerra dos hermanos en un enfrentamiento (se ve que el frente llegó allí). Los hermanos eran de Villahermosa y cada uno militaba en un bando. De mala suerte fue que uno matara al otro, sin saberlo, claro. Era una historia que se contaba en Villahermosa. Saludos y gracias por el artículo

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    1. Hola Toni, muchas gracias a ti por tu comentario. Me parece muy muy interesante todo lo que cuentas y te agradezco que lo hayas compartido en el blog :) Sí que es cierto que es una zona con mucho encanto y, además, con mucha historia. Increíble lo que cuentas de los dos hermanos... Y también qué bien que hayas tenido la ocasión de conocer a la última maestra de Bibioj. Es una pena que se pierdan pueblos así. Ojalá se rehabilite o hagan algo con lo que queda, es precioso.
      El Mas de Borràs es un sitio muy chulo y con actividades distintas a otros sitios. La verdad es que hace tiempo que no vamos y dan ganas de ir de nuevo, precisamente en esta época del año, a hacer a alguna ruta por allí y adentrarnos otra vez en los maravillosos bosques que lo rodean.
      Un abrazo y gracias de nuevo por tu comentario y aportación.

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  8. Hola, yo he visitado Bibioj en tres ocasiones y en mi segundo viaje también pude conocer a la familia que vivía en el colegio. El año pasado estuve en febrero y pude comprobar el gran deterioro que sufren las casas del pueblo. Es una verdadera lástima. Realicé una serie de fotos que he subido a mi página en flickr, os dejo el enlace por si os apetece verlas: https://flic.kr/s/aHskwEQ2jg

    Un saludo.

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